El RIGI, implementado bajo la Ley 27.942, se diseñó para facilitar grandes inversiones en minería, energía, infraestructura y tecnología, reduciendo el impuesto a las ganancias del 35% al 25%. Este cambio representa una mejora considerable en la rentabilidad para las empresas, que además pueden ajustar sus pérdidas por inflación, una ventaja importante en el contexto económico argentino.
Uno de los atractivos más significativos para las empresas mineras es la exención arancelaria en la importación de bienes de capital, lo que disminuye sustancialmente los costos en la adquisición de equipos y maquinaria importada. Además, el régimen asegura estabilidad fiscal y cambiaria por 30 años, lo cual proporciona la previsibilidad necesaria para proyectos de larga duración.
Para adherirse al RIGI, los proyectos mineros deben cumplir con un umbral de inversión mínimo de US$ 200 millones, aplicable tanto en exploración como en explotación. Se destacó que el uso de Vehículos de Proyecto Único (VPU) es una herramienta útil para gestionar estos emprendimientos, permitiendo mayor flexibilidad en la administración de capital y en los aspectos fiscales del régimen.
Estos beneficios, se presentan como una oportunidad única para que Argentina aproveche su riqueza mineral en un contexto global de creciente demanda de recursos para tecnologías verdes, como el litio y el cobre. Este régimen promete atraer inversiones que, a su vez, impulsarán el crecimiento económico y la creación de empleo en el país. San Juan, cuenta con una rica base de recursos, y el RIGI es un impulso clave para atraer inversiones a gran escala.
También, se recomienda a los inversores interesados que presenten planes sólidos de inversión, acompañados de la documentación técnica y financiera necesaria. El apoyo de equipos de asesoría locales se sugiere como clave para asegurar que los proyectos se implementen de manera eficiente y se maximicen los beneficios que ofrece el régimen.
Este esquema se posiciona como una base sólida para atraer capital extranjero y fomentar el desarrollo de sectores estratégicos de nuestra provincia, brindando una estructura de estabilidad y oportunidades que resulta atractiva para la inversión internacional en minería y otras industrias de gran impacto en el país.
Los beneficios del RIGI: el nuevo motor para atraer inversión minera en Argentina (y en nuestra provincia)
Con beneficios fiscales, exenciones arancelarias y una estabilidad cambiaria a largo plazo, San Juan busca atraer a grandes inversores para fortalecer su industria minera. El Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) se convierte en una herramienta clave para impulsar proyectos en un contexto global de creciente demanda de minerales.