Después de un largo proceso de revisión técnica y planificación, la mina Casposo volvió a ponerse en marcha y ya produce oro y plata en Calingasta. El proyecto, operado por la empresa de capitales argentinos Austral Gold, marca un nuevo capítulo para la minería sanjuanina y para la compañía, que logró reactivar una operación con historia y potencial.
La reanudación no fue inmediata. Detrás hubo meses de trabajo intenso, con la elaboración de un nuevo reporte técnico y la actualización de reservas y recursos minerales. Solo cuando esos estudios confirmaron la viabilidad del proyecto, la compañía decidió avanzar hacia la producción comercial, utilizando los acopios de mineral que se encontraban disponibles en el yacimiento.
“Reiniciar Casposo es un hito muy importante para nosotros”, afirmó José Bordogna, CFO de Austral Gold. “No solo ampliamos nuestra base productiva junto con las operaciones en Guanaco (Chile), sino que también reafirmamos nuestro compromiso con la minería argentina”.
La decisión de volver a producir también implicó un impacto directo en el empleo local: hoy trabajan en el proyecto 116 personas de manera directa y otras 100 de forma indirecta, una señal alentadora para Calingasta, que vuelve a ver movimiento en una de sus zonas mineras emblemáticas.
Según los datos técnicos más recientes, Casposo cuenta con reservas estimadas en 80.000 onzas de oro y 3 millones de onzas de plata, con una proyección de producción de entre 4.000 y 6.000 onzas de oro equivalente para el cuarto trimestre de 2025. El plan base contempla una vida útil de seis años, trabajando con mineral propio.
Con esta reactivación, Austral Gold vuelve a operar a ambos lados de la cordillera, con Casposo en Argentina y Guanaco en Chile, consolidando su presencia regional y demostrando que, con visión y planificación, es posible recuperar proyectos valiosos y volver a generar oportunidades.
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